En invierno notamos que nuestra factura de la luz engorda, suponiendo el gasto en calefacción más del 60% del consumo de energía. Es por ello que se hace necesaria su programación a unos 20 grados de temperatura ideal. Para esto necesitamos un cronotermostato. Pero… ¿qué significa esta palabreja?
Se trata de un aparato que sustituye al termostato controlando, además de la temperatura, el tiempo, por lo que es capaz de regular la temperatura de una vivienda para distintos momentos del día.
Modalidades
Confort
La temperatura se acerca en esta ocasión más a la deseada, es decir, la más alta en invierno y la más baja en meses de verano.
Eco
Cuando estamos fuera de casa, la temperatura se aleja de la deseada con el fin de ahorrar en climatización, y de paso llegar antes a la temperatura deseada que mencionábamos anteriormente, para cuando llegamos a nuestra vivienda.
Ventajas
Ahorro en la factura
Conseguimos ahorrar en nuestra factura de la luz, puesto que se economiza al máximo la temperatura según nuestra rutina, y por lo tanto se regula el gasto. Además, hay que tener en cuenta que se consume más en la puesta en marcha del aire acondicionado o radiador, que si mantenemos el sistema encendido todo el día a una temperatura ideal.
Temperatura perfecta
De esta manera conseguimos la temperatura perfecta para nuestro hogar, y la alcanzamos fácilmente cuando llegamos a casa.
Puesta en marcha por control móvil
Cuando contamos con una segunda residencia, los cronotermostatos más avanzados dan la posibilidad de controlar la temperatura desde nuestros teléfonos móviles. Así, si tenemos pensado ir de fin de semana, pondremos en marcha la temperatura deseada unas horas antes de llegar.
Una vez hayáis comprado vuestro cronotermostato podéis llamar a un profesional para que os lo instale o instalarlo vosotros mismos, tal como se indica en el siguiente vídeo:
¿Algo que añadir? 😉